Está comprobado que el cambio es vital para el éxito de una empresa. No obstante, no se suele implementar de manera oportuna un marco de gestión de cambios estructurado y a veces no se implementa en absoluto, incluso cuando es necesario.
Como resultado, el cambio puede ser abrumador y parecer un desafío insuperable, causando confusión y desmotivación en los equipos, incluso antes de comenzar. El cambio constante es la nueva normalidad, sin embargo, no todas las empresas han creado un ambiente que pueda generar un ADN de la transformación que permee en toda la organización.
El ADN de la transformación genera la habilidad excepcional de responder a cambios inesperados. La transformación debe anticipar, calcular proactivamente y responder a un sinfín de imprevistos.
Una clave para triunfar en este sentido es la creación de una red de agentes de transformación. Estos colaboradores ya se encuentran en toda la organización: son quienes promueven la mejora continua de la operación y participan en el desarrollo de iniciativas, reúnen retroalimentación continua, alinean los objetivos de transformación e inspiran a sus compañeros a apoyarse entre ellos frente a la disrupción.
En AT&T México creemos que el ADN de la transformación cuenta con las siguientes 5 características:
1. El éxito del cliente está al centro de la cultura corporativa. Todo comienza y termina con el cliente.
2. Aprendizaje y mejoras constantes. Las cuales deben suceder de manera integral y objetiva.
3. Compromiso con los datos y hechos. Es importante incluir un enfoque científico y un conocimiento profundo de ingeniería.
4. Colectivo de mentes brillantes. El liderazgo hace posible que los equipos se empoderen para tomar decisiones e innovar.
5. Celebrar los logros. El reconocimiento a las personas de nuestro equipo debe hacerse de manera constante y libre.